miércoles, 17 de enero de 2024

Hallan la mano articulada de un Neosclerocalyptus en el Pleistoceno de San Pedro.






Son restos fósiles de un mamífero de unos 200 kilogramos que murió en un pantano a finales de la Edad Ensenadense, en las afueras de San Pedro.

El equipo del Museo Paleontológico de San Pedro, a 170 kilómetros de Buenos Aires, realizó un hallazgo poco frecuente. Los investigadores dieron con restos de un animal de unos 200 kilos que conserva partes de su anatomía con la misma disposición que cuando caminaba por la llanura pampeana prehistórica.

El inusual descubrimiento se dio en las afueras de la ciudad bonaerense, en una capa de suelo que hoy está ubicada a unos nueve metros debajo del nivel de piso actual.

Desde la Dirección del museo sampedrino, José Luis Aguilar explica detalles del hallazgo:

“Este material fósil apareció durante una exploración de rutina en un sector de barrancas que rodean a la ciudad. En una capa sedimentaria muy consolidada, cuya antigüedad supera los 500.000 años. Allí, logramos observar varias piezas pertenecientes a un animal cuyo nombre científico es Neosclerocalyptus ornatus. Un armadillo prehistórico con un cuerpo acorazado cercano a los dos metros de longitud”.

“No es común encontrar partes complejas como pueden ser las manos y pies; con varios pequeños huesitos que forman parte de esas estructuras, en un estado impecable después de cientos de miles de años. Las extremidades recuperadas están intactas. Como si hubiera muerto hace pocos días”, comenta Aguilar.

Por lo general, detallan desde el museo, cuando los animales mueren, los esqueletos sufren diferentes factores que los desintegran, dispersan o erosionan. Este ejemplar, sin embargo, al haber muerto empantanado en un antiguo humedal, se conservó como en un estado de “suspensión temporal”.

“Estos son los fósiles más buscados por los paleontólogos debido a que brindan amplia información de la anatomía, movilidad, peso y demás datos, vinculados a la especie que esté siendo hallada. No es lo mismo encontrar un hueso aislado de una mano o un pie y realizar un análisis de sus características, que encontrar toda la estructura de uno de los miembros del animal y evaluarlo y analizarlo en todo su conjunto, donde estás viendo el lugar y la función que ocupa y que cumple cada una de las partes individuales en la estructura general”, explican desde el Museo Paleontológico de San Pedro.

El hallazgo del museo incluyó, además, las dos ramas mandibulares, también articuladas; un húmero completo; fragmentos de la coraza y una sucesión de varias vértebras completas de la cola del mamífero fósil. En el arduo trabajo para extraer las piezas de la roca, intervienen Julio Simonini, Santiago Ferreyra, integrantes del equipo del Museo Paleontológico de San Pedro. Ilustración de Carlos Alberto Montefusco. Fuente; Museo Paleontológico de San Pedro "Fray Manuel de Torres".

Más info en http://www.grupopaleo.com.ar/paleoargentina/principal.htm