viernes, 19 de enero de 2024

Conoces a Conflicto antarcticus?.

A juzgar por la forma y las proporciones de los huesos pectorales y del ala, sin dudas tenía capacidad de volar. Esta ave vivió poco después de la gran extinción de los dinosaurios. Científicos estudiaron un fósil antártico que permite conjeturar que este tipo de boca apareció evolutivamente temprano en las aves Anseriformes. En el año 2007, investigadores del Instituto Antártico Argentino encontraron en la isla Marambio, al Noreste de la Península Antártica, el esqueleto casi completo de una nueva especie de ave que vivió hace 65 millones de años durante el Paleógeno Temprano. Luego de varios años de preparación y estudio del fósil,  el hallazgo fue presentado en Zoological Journal of the Linnean Society. El estudio determinó que el fósil analizado pertenece a un nuevo género y especie basal de Anseriformes (patos, cisnes y gansos) de una familia aún indeterminada. Se lo denominó Conflicto antarcticus en virtud de la conflictiva posición filogenética, debido a que sus características son diferentes a las de otras aves conocidas. Los Anseriformes actualmente habitan ambientes acuáticos y se considera que la explotación de los cuerpos de agua continentales proporcionó la base para la formidable diversificación de este grupo. A diferencia de la mayoría de las Neoaves acuáticas que son carnívoras-como los macaes y los somormujos, los anseriformes se alimentan de plantas o pequeños invertebrados acuáticos. Para ello cuentan con unas laminillas en el pico que les permite filtrar su alimento. Al analizar este esqueleto fósil, los científicos pudieron determinar que Conflicto antarcticus, a juzgar por la forma y las proporciones de los huesos pectorales y del ala, sin dudas tenía capacidad de volar. Aunque no se encontraron los tarsometatarsos ni las falanges (huesos del miembro posterior), los restos óseos que se conservaron de estas extremidades muestran que tenía patas alargadas. Sin embargo, aunque pertenece al grupo de los Anseriformes, su apariencia no concuerda con la de los patos o gansos. Conflicto antarcticus tenía un cuerpo grácil y estilizado, con miembros alargados, como se observa en los flamencos, pero poseía un cráneo similar al de un pato, aunque con un pico más delgado. Conflicto antarcticus, al estar representado por un material tan completo y bien preservado es posiblemente el más importante registro de un ave no marina del Paleoceno del hemisferio sur. Según evidencias sedimentológicas y de otros fósiles, Conflicto antarcticus habría habitado un ambiente cálido y húmedo que se caracterizaba por bosques templados donde la temperatura media anual terrestre osciló entre 9 y 15°C. Mas info en http://www.grupopaleo.com.ar/paleoargentina/paleoceno.htm