La
gran extinción de la megafauna y de especies autóctonas ocurrió durante el
Pleistoceno tardío y el Holoceno temprano, cuyo evento se refleja en un ámbito
global.
Por
lo general, cuando hablamos de extinciones populares, recordamos las teorías de
la desaparición de los dinosaurios, a pesar, que durante el Paleozoico ocurrió
el evento más importante de toda la historia geológica y biológica del planeta,
afectando prácticamente el 90% de la totalidad de la vida en aquel entonces.
Con
respecto al Cenozoica, época que nos compete, podemos señalar un evento
ocurrido durante el Plioceno superior, atribuida a cambios climáticos, producto
de un impacto de asteroide, que detallaremos más adelante.
Durante
el Cuaternario tardío (Pleistoceno – Holoceno) se produjo una importantísima
disminución en especies de origen autóctono y aloctono, incluyendo además, la
extinción del 90% de los Megamamiferos, entre los que podemos incluir a los
Megaterios (Megatherium americanum), Gliptodontes (Glyptodon s.p), Toxodontes
(Toxodon platensis) y otros más pequeños, como el tigre dientes de sable
(Smilodon populator) etc.
Se
lo atribuyo a un grado de competencia entre los organismos que se desarrollaron
por largo tiempo en Sudamérica, contra aquellos que llegaron durante “El Gran
Intercambio Biótico Americano” que ocurrió hace unos 3 millones de años,
sugiriendo que estos últimos estaban mejor “adaptados o evolucionados” que los
anteriores, compitiendo por los espacios o nichos ambientales, logrando una
readaptación con estos últimos. Por Magnussen Saffer, Mariano. 2005. Ilustracion
del PaleoArtista Daniel Boh