Un equipo científico de Estados Unidos y Argentina ha
identificado que se corresponde con el grupo de las Rhamnaceae y ha podido
profundizar en cómo fueron las conexiones de la vegetación entre los continentes.
Investigadores de la Cornell University (Estados Unidos),
de la Universidad Nacional del Comahue y del Instituto de Investigaciones en
Biodiversidad y Ambiente (INIBIOMA-CONICET) de San Carlos de Bariloche, Rio
Negro (Argentina) y de la Universidad Estatal de Pennsylvania (Estados Unidos)
han estudiado flores fósiles halladas en rocas de 64 millones de años en la
denominada Formación Salamanca, en la Patagonia (Chubut, Argentina).
En el Hemisferio Sur rocas de esta edad (Paleoceno
temprano) son muy escasas y su estudio muy importante, ya que corresponde al
periodo de tiempo más antiguo que se conoce para la era Cenozoica, justo al que
siguió a una gran extinción masiva a nivel global. Existen muy pocos registros
en el mundo de lo que ocurrió después de esta gran pérdida de finales del
periodo Cretácico, cuando más del 70 por ciento de la flora y fauna del planeta
se extinguió.
Durante las campañas de campo en Patagonia realizadas
entre el 2005 y el 2012, los investigadores pudieron recopilar varias flores
fósiles que se preservaban dentro de rocas, aplastadas en forma de lajas. Los
materiales, muy pequeños, tuvieron que ser limpiados de sedimento que lo
cubría.
Las ramnáceas (Rhamnaceae), se trata de árboles o
arbustos, a veces trepadores con espinas, y matas. Hojas simples con frecuencia
alternas, a veces opuestas, con estípulas caducas o transformadas en espinas;
flores inconspicuas, hermafroditas o unisexuales, pentámeras o tetrámeras,
diclamideas o monoclamideas, de ovario súpero o ínfero, con un óvulo por
lóculo.