Fueron los depredadores de mayor tamaño en los mares del
ordovícico, hace 450 millones de años. Se encuentra en las aguas tropicales
entre los océanos Índico y Pacífico.
A diferencia de otros moluscos cefalópodos, como el pulpo
o el calamar, el nautilo tiene unos ojos simples, sin cristalino. También, en
lugar de un par, tienen dos pares de branquias y hasta 90 tentáculos dispuestos
en dos círculos alrededor de la boca.
Pero por lo que más se caracterizan es por su envoltura o
concha lisa y enrollada, de hasta 28 cm de diámetro. Está forrada con nácar y
dividida en una serie de compartimentos progresivamente mayores, el último de
los cuales les sirve de vivienda.
Las paredes (septos) que forman las cámaras están perforadas
por un tubo (sifón) que está unido al animal. El intercambio de líquidos y
gases que se produce a través de sus paredes, permite al nautilo regular la
posición hidrostática.
Parece que el nautilo descansa durante el día en el fondo
del océano a unos 600 m de profundidad. Por la noche nada por los alrededores
forzando la salida de agua a través de una especie de embudo primitivo que
posee para este fin y se alimenta de diatomeas, quisquillas y algas.
Cuando se está alimentando mantiene sus tentáculos extendidos
para atrapar todo lo que se acerque a ellos. Los tentáculos son pequeños,
contráctiles y adhesivos, pero no tienen ventosas. Se conoce poco acerca del
comportamiento y el ciclo de vida de este molusco.