Fue la
especie de mayor tamaño dentro de la familia de los Gliptodontidos. Tenía 4,3
metros de largo y 2 metros de alto. La coraza tiene una forma muy particular,
presentando una especie de joroba en su parte más alta, con placas más
laxamente unidas que en otros parientes de la época.
Su cola
estaba formada por cuatro anillos, un tuvo cilíndrico de un metro de largo y en
su término poseía una masa ósea con púas corneas, convirtiéndose en una técnica
de defensa contra los habituales depredadores. Sus extremidades son
sorprendentemente robustas y su columna y cadera se encuentran soldadas al
caparazón del animal. Se alimentaría al igual que otros de sus parientes de
pastos cortos y de zonas semi-aridas. Su masa estimada en vida es de 2
toneladas.
Todas las
especies se extinguieron sin dejar representantes. En la región pampeana el
hallazgo de Gliptodontes es algo muy frecuente, con acepción del genero Doedicurus,
que solo se lo a registrado por fragmentos de la coraza, restos dentarios
aislados y rara vez, piezas semi-articuladas.
Asimismo
restos bien preservado de la especie fueron rescatados en dos campañas
paleontológicas en 1918 por Carlos Ameghino y Lorenzo Parodi, cuyos restos en la
actualidad se encuentran depositados en el Museo Argentino de Ciencias
Naturales "Bernardino Rivadavia" e Instituto Nacional de
Investigación de las Ciencias Naturales de Buenos Aires, República Argentina.
Foto Doedicurus tuberculatus. Exhibido en la ciudad Santiago del Estero.