Un equipo de paleontólogos que trabaja en el norte de la Patagonia, Argentina, desenterró los fósiles de una especie previamente desconocida de pequeño titanosaurio rinconsaurio, que habitó la región durante el Cretácico Tardío, hace aproximadamente 78 millones de años.
El dinosaurio fue bautizado Chadititan calvoi y pertenece al grupo de los Rinconsauria, un clado exclusivo de titanosaurios argentinos. Este grupo fue establecido en 2007 para incluir a los géneros Rinconsaurus y Muyelensaurus, y se caracteriza por reunir dinosaurios delgados, de cuerpo liviano y tamaño relativamente pequeño, que no superaban los 11 metros de longitud, con extremidades rectas y una cintura pélvica notablemente modificada.
Según explicó el paleontólogo Dr. Federico Agnolin, del Museo Argentino de Ciencias Naturales “Bernardino Rivadavia” y la Fundación de Historia Natural “Félix de Azara”, Chadititan calvoi era uno de los miembros más pequeños y esbeltos del grupo.
“Al comparar la longitud de su fémur con la de otros rinconsaurios, como Bonatitan, estimamos que el cuerpo completo de Chadititan alcanzaba cerca de 7 metros de largo”, señaló el investigador.
Los especialistas destacan que este nuevo titanosaurio confirma que los rinconsaurios presentaban una morfología corporal diferente al resto de los titanosaurios, con una postura similar a la de los braquiosaurios, extremidades gráciles y una cola particularmente delgada.
Los restos fósiles de varios individuos de Chadititan calvoi fueron hallados en una nueva localidad de la Formación Anacleto, cerca de la ciudad de General Roca, en la provincia de Río Negro. La zona se encuentra dentro de la propiedad de la familia Marín, en cercanías de Paso Córdoba, a unos 10 kilómetros al sudoeste de la ciudad.
El área está formada por pequeñas badlands dispersas y bajas colinas que delimitan el sector oriental del bajo conocido como “Salitral Moreno”. A pesar de la limitada extensión de los afloramientos, el sitio produjo un número extraordinario de fósiles.
Un dato llamativo del hallazgo es la ausencia total de osteodermos (placas óseas dérmicas) asociados a Chadititan calvoi. Según los investigadores, al no encontrarse tampoco en otros rinconsaurios, es posible que estos titanosaurios carecieran completamente de este tipo de estructuras protectoras.
Junto al nuevo titanosaurio, el equipo descubrió un importante conjunto de fósiles de vertebrados e invertebrados, que incluye moluscos, peces pulmonados, tortugas, parientes de cocodrilos, dinosaurios, caracoles y almejas. Todos estos restos estaban depositados en lo que alguna vez fue un pequeño estanque rodeado por dunas de arena y palmeras, dentro de un ambiente predominantemente árido.
Entre los hallazgos más relevantes se destacan el primer registro fósil de la familia Neocyclotidae —caracoles terrestres tropicales— y el primer registro indiscutido del género Leptinaria, un pequeño caracol terrestre tropical pulmonado.
El paleontólogo Dr. Diego Pol, explorador de National Geographic e investigador del Museo Argentino de Ciencias Naturales, señaló:
“Además del descubrimiento de Chadititan calvoi, los fósiles de moluscos, peces y tortugas enriquecen enormemente nuestra comprensión de este antiguo ecosistema y amplían nuestro conocimiento sobre la vida en la Patagonia hacia el final de la era de los dinosaurios”.
Los investigadores destacan que la simple presencia o ausencia de determinadas especies permite reconocer particularidades ambientales únicas. En este caso, la gran abundancia de tortugas y la escasez de cocodrilos, en comparación con regiones contemporáneas de Europa y América del Norte, subraya las singulares condiciones ecológicas de los ecosistemas patagónicos, en un momento en que los continentes ya comenzaban a separarse durante el Cretácico.
Un dato especialmente notable es que las tortugas de agua dulce representan más del 90 % de los fósiles recuperados, un porcentaje excepcional, considerando que en sitios equivalentes de América del Norte y Europa raramente superan el 50 % del total de la fauna.
Los resultados de esta investigación fueron publicados en la Revista del Museo Argentino de Ciencias Naturales, aportando un nuevo capítulo al conocimiento de los dinosaurios y los antiguos ecosistemas del sur de Sudamérica.
Mas info en http://www.grupopaleo.com.ar/paleoargentina/principal.htm

